«ESTUDIO INTERCULTURAL DE LA SABIDURÍA
AUTÓCTONA ANDINA»
Por: Mijaíl Enríquez
- 2018
Hoy tuvimos la
grata compañía del Filósofo y Teólogo Josef Estermann, un hombre sencillo que aprendió filosofía y tuvo la valentía de desaprender
para seguir aprendiendo.
Nos habló de algo que a muchos nos apasiona, de Filosofía, pero no de aquella que surgió en
Grecia, muy ajena a nuestra vivencia, y que al transcurrir los años fue denominada
como filosofía occidental; sino de una FILOSOFÍA ANDINA que quizá esta mas
arraiga en nuestro corazón (interioridad).
Somos conscientes
que se trata de un tema muy controversial, pero el hermano precisaba que «es de
suma importancia rescatar el pensamiento de los pueblos andinos como autentica filosofía».
O en tal caso otra forma de sabiduría de la que “oficialmente” se conoce.
Por mucho tiempo
la filosofía académica occidental dominó, y miró con cierto recelo a las filosofías
contextuales. Ya sea la filosofía africana, oceánica y por lo tanto andina.
Muchos aún tienen
el prejuicio de que la filosofía es para unos cuantos “elegidos” o se trata de cosa
de “sabios” porque aún están marcados por la concepción racionalista de la filosofía.
¿Y porque la filosofía tiene que ser exclusivamente
racional?
Si es más bien “Sentí- pensante” que no solo
razona sino tambien
es “co-razonada” se trata de un proceso integral, e inter- cultural, y
sobre todo relacional. Que no basta con el “día-logo” sino por el “poli-dialogo”
es decir a través, de muchos diálogos.
El hermano
Estermann define muy profundamente la filosofía: “sabiduría del amor”, pues lo
racional no es lo exclusivo, sino la reciprocidad, la narración y el tejido
relacional.
Esta sabiduría constituye
para el:
-
Una PROPUESTA.- frente a “absolutización” de la filosofía
académica occidental –escolástica.
-
Una PROVOCACION.- para desarrollar más
sabiduría andina.
-
Una PROMESA.- pues la
interculturalidad constituye el camino de la convivencia en el futuro.
La filosofía
andina constituye un modo liberador, sin dejar el dialogo y la
interculturalidad. Esta filosofía intercultural nos permite llegar a valores
universales, y mantiene cierto equilibrio entre un fundamentalismo filosófico occidental
o de un indigenismo que busca “cierta
pureza” y un “regreso a una época dorada inca”; y de otro extremo que donde se
posiciona tan fuertemente como es un relativismo absoluto.
Fue un
con-vivencia muy enriquecedora, y un
compartir filosófico muy grato.
Fue un ejercicio
de DECONSTRUCCION: es decir de volver a re- pensar aquellos conceptos filosóficos que tenía,
pues siempre habrá tensión entre mi razón racional y co-razón andino.